Las reglas de salud bucal generalmente nos indican que debemos lavarnos los dientes tres veces al día, usar de manera adecuada el hilo dental e ir al dentista al menos cada seis meses, pero podríamos estar dejando de lado un factor muy importante en cuanto a proteger nuestra boca: la higiene del cepillo dental.
La FES Zaragoza, relacionada la Universidad Autónoma de México (UNAM), divulgó que el cepillo dental al estar en contacto directo con nuestra boca, es “foco importante de cultivo de bacterias”. Es verdad que al sacar del empaque el cepillo llega estéril a nuestras manos, pero en cuanto lo usamos para lavar los dientes, quedan contaminados con una gran cantidad de bacterias.
Las bacterias provienen de las enfermedades dentales e incluso de las heces si se guarda en el baño.
¿Por qué desinfectar el cepillo dental?
La UNAM informó que México enfrenta un problema de salud bucodental, ya que gran parte de la población tiene caries o gingivitis.
A menudo el cepillo dental únicamente se enjuaga con agua, lo cual no elimina la acumulación de microorganismos que afectan a la salud de la boca.
El proceso de desinfección debe hacerlo cada persona, y cuando se realice, se debe utilizar agua embotellada o de garrafón, para que el proceso de limpieza sea profundo.
IMPORTANTE: El periodo de vida útil de un cepillo dental varía de uno a tres meses, despenderá de la calidad de las cerdas del cepillo y el uso que se le dé. En este tema también entra como factor determinante la salud bucal de la persona: si padece alguna enfermedad dental es recomendable consultar con el dentista cada cuánto tiempo se debe cambiar el cepillo.
¿Cómo desinfectar el cepillo dental?
La Universidad Autónoma de México especifica algunos líquidos que pueden ser útiles para una desinfección completa del cepillo dental.
Estos son:
Peróxido de hidrógeno o agua oxigenada. Se debe manejar con cuidado, ya que puede dejar residuos en las fibras de las cerdas del cepillo, mismos que podrían causar irritaciones en la boca; sin embargo, su acción es inmediata.
Microbicida. El famoso líquido que usan las amas de casa para desinfectar frutas y verduras, también se puede aplicar para matar bacterias en los cepillos.
Enjuague bucal. Muchos de estos productos que se venden en los supermercados tienen un gran poder antibacteriano, que de manera rápida, pueden eliminar los microorganismos de los cepillos.
Cloro. En un vaso con agua, agregas un poco de cloro y sumerges la cabeza del cepillo, o si quieres una desinfección total, usas una bandeja y depositas el utensilio completo. Hay que dejarlo actuar durante media hora y después enjuagar muy bien con agua de garrafón o botella.
¿Qué hago después de desinfectar el cepillo dental?
Los cepillos deben secarse correctamente sin dañar sus fibras, para esto se puede utilizar una toalla en la que se envuelve el cepillo para darle vueltas lentamente.
Si usas un cepillo eléctrico, los expertos en salud bucal recomiendan cambiar el cabezal cada dos meses y desinfectar el mango con un paño humedecido con agua y cloro.
Si padeces gingivitis, las bacterias pueden ser abundantes, por lo que ante esta situación debes cambiar el cepillo máximo después de un mes.
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